Con motivo de un nuevo aniversario de nuestra ciudad en el mes de junio, la Comisión de Cultura hizo el lanzamiento de una actividad llamada HISTORIAS DE TARARIRAS. La idea fue invitar a personas mayores a escribir anécdotas e historias de tiempos pasados, con el objetivo de rescatar esa memoria y compartirlas con las generaciones más jóvenes. Estas HISTORIAS forman parte de nuestra cultura local, es por eso que queremos compartirlas ya que seguramente provocarán recuerdos y otras historias. Agradecemos a quienes participaron haciendo posible esta actividad.
CASA DALMAS
La Casa Dalmas era un comercio de ramos generales. Era más grande que un supermercado de ahora. Se vendían desde autos hasta una pieza de porcelana. Había almacén, tienda, etc y también acopiaban semillas. Los productores embolsaban las cosechas y se acopiaban en los galpones, para luego enviarse por tren cuando se vendían.
Recuerdo que en el almacén trabajaban los Caffarel: Esteban y después Rubén.
Empecé a trabajar en lo Dalmas en 1949, a los 14 años, cuando salí de la escuela. Ganaba $5, después me fueron aumentando, con el paso de los años. Trabajaba en la tienda. Para llegar a los estantes había que subir por escalera, porque era muy alto. Mi primer accidente de trabajo fue cuando me caí de la escalera.
Además de atender a los clientes, teníamos que repasar y lavar el piso.
Una vez, habían comprado portarretratos para vender. Eran de vidrio porque en esa época no había cosas de plástico. Al ordenarlos se me rompió uno, ¡ Qué nervios!, pero por suerte no pasó nada.
Había mucho compañerismo. Recuerdo algunas compañeras con las que trabajábamos juntas: Maruja, Mary y Nelly Thul, las Maino, “Tola” Ugón, Olga y Élida Arenas.
A veces me encuentro con gente a la que le vendí la ropa para el casamiento.
Aprendí a ser responsable de mi trabajo y a nunca llegar tarde.
Nelba Llorca (Chiquita)
Hogar Tarariras